Después de estar trabajando mucho en la cocina en restaurantes de varias estrellas, Jacobo Rodríguez necesitaba lidiar con ese estrés. Comenzó haciendo yoga hasta que paulatinamente se convirtió en profesor. "El yoga y la cocina son además similares, necesitas todos los sentidos", dice en entrevista con Pía Castro. Lleva 26 años en Berlín, aunque llegó primero a Dinamarca con un intercambio estudiantil. Su vida se ha ido moldeando de acuerdo con un modelo europeo, la comida estilizada y el yoga. "Los alemanes son muy relajados... en fin de semana", dice de sus clases de yoga. Y a los venezolanos que han ido saliendo de su país y que llegan a Alemania, les recomienda un par de cosas: aprender alemán y tener una vida relajada.