Callejón sin salida
13 de marzo de 2003El primer Ministro británico, Tony Blair, propuso seis condiciones para evitar la guerra. Estas condiciones deberían cumplirse en cuestión de días y prevén entre otras cosas que Saddam Hussein reconozca públicamente que ha escondido armas de destrucción masiva y que se comprometa a entregarlas. Además que entregue sus reservas de ántrax; la autorización para que treinta científicos de su país sean entrevistados fuera de Irak y la promesa de destruir todos los misiles prohibidos por la ONU.
Moscú rechaza propuesta
Es poco probable que esta nueva propuesta británica prospere. Moscú no tardo en rechazarla a la vez que repetía que vetará cualquier proyecto de resolución que incluya una ultimátum y que directa o indirectamente de vía libre a una acción militar contra Irak. Declaraciones que hace ignorando las amenazas de Washington, pronunciadas por el embajador de Estados Unidos en Moscú, Alexander Vershbow, quien indicó que podrían deteriorarse las relaciones entre ambos países si Moscú mantiene esta postura. Vershbow fue muy preciso y no escatimo en claridad al hablar de un recorte de inversiones estadounidenses en Rusia, y una menor cooperación bilateral en el campo energético, la lucha antiterrorista y la colaboración en el sector espacial.
Postura inamovible
Los esfuerzos en búsqueda de la segunda resolución de la ONU, reunieron al incansable primer ministro Blair con el canciller alemán, Gerhard Schröder en Londres. Uno más de la serie de encuentros bilaterales que ha mantenido Blair en los últimos días, uno más sin posibilidad de éxito. Ambos socialdemócratas defienden posiciones diametralmente opuestas y lo único que los une en este momento es la debilidad política en sus respectivas naciones y una profunda amistad que tampoco la crisis iraquí podrá minar, según afirmaran ambos mandatarios en Londres. En lo que respecta al conflicto iraquí, será difícil que Schröder se aparte de su política que busca una solución pacífica de la crisis.
Anuncios peligrosos
Estados Unidos, según información de la cadena de televisión estadounidense CNN, ha logrado reunir el apoyo de 8 de los 15 miembros no permanentes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Los estados africanos Angola, Camerún y Guinea han señalado aprobación de la nueva resolución sobre Irak presentada por Estados Unidos, Gran Bretaña y España, según CNN. De ser cierto faltaría ya sólo el apoyo de México y/o Chile para que la batalla diplomática de la Casa Blanca llegue a su fin y comience entonces la batalla militar.