CeBIT: un balance
9 de marzo de 2009
Unas 400.000 personas visitaron este año la CeBIT, un 20 por ciento menos que el año anterior, mientras que el número de expositores disminuyó un 25 por ciento, reduciéndose a 4.300.
Sobre todo numerosas empresas asiáticas pequeñas y medianas del sector renunciaron este año a estar presentes en la feria de Hannover.
La superficie de exposición disminuyó en un 20 por ciento, llegando igualmente a 200.000 metros cuadrados. Especialmente la atención llamó que algunos grandes consorcios internacionales como Toshiba y Samsung renunciaran a acudir a Hannover.
Más visitantes especializados
No obstante, Ernst Raue, director general de Deutsche Messe, la organizadora de la CeBIT, esboza un cuadro positivo: "En tiempos como los que corren es ya un gran logro organizar una feria con efectos globales, como ésta. E independientemente de cuántos expositores y visitantes vinieron, la feria ha tenido un muy positivo efecto para fabricantes y los sectores que aplican la tecnología”.
Es más, agrega, el número de visitantes especializados ha aumentado. De esa forma, “la CeBIT ha marcado más claramente su perfil como plataforma para contactos de negocios. Por lo menos en esa área, la feria estuvo al mismo nivel que el año anterior”.
Así lo confirma también August-Wilhelm Scheer, director de BITKOM, la asociación del sector alemán de la información y la comunicación: “Nuestros expositores han quedado muy satisfechos. Muchos vuelven a casa con los libros de pedidos llenos. Las expectativas han sido superadas en muchos casos. Nuestro sector no se arredra por la crisis y es un factor estabilizador, porque ayudamos a otras empresas a resolver sus problemas.”
La feria “matacrisis”
Scheer agregó que la crisis no afecta al sector informático en la misma medida que el del automóvil y que ese mercado, junto al de las telecomunicaciones y la electrónica de ocio, mantendrá este año en Alemania el volumen de negocios alcanzado en 2008 y que fue de 145.000 millones de euros.
La feria apostó correctamente por temas de candente actualidad y gran relevancia para el futuro, dice por su parte Raue, transformándose en un verdadero “matacrisis”. Como ejemplos citó las tecnologías ambientales (TI verde), que permiten que otras industrias puedan reducir los costos de fabricación y de energía.
Autor: Pablo Kummetz
Redactor responsable: José Ospina Valencia