Detienen a una periodista en Panamá por grabar a una juez
3 de enero de 2019
"En minutos seré guardada en un calabozo; he sido esposada porque traté de entrevistar a la jueza y ella dijo que estaba invadiendo su privacidad, por eso ha dado esa orden, espero que hagan algo; porque es mi trabajo periodístico", fue el mensaje enviado por Ligia Arreaga. La periodista y ambientalista ecuatoriana fue arrestada en Panamá este miércoles (02.01.2019) mientras trataba de hacer una entrevista sobre un cobro a productores para poder vender sus alimentos.
La comunicadora, que cubría el trabajo en la provincia occidental de Chiriquí, limítrofe con Costa Rica, denunció su detención en una nota de voz a través de la aplicación de mensajería instantánea WhatsApp desde un cuartel de la Policía de Puerto Armuelles. La juez ordenó que la esposaran después de que tratara de grabarla con su cámara.
Antes de que fuese aprehendida, la periodista recopilaba datos sobre el supuesto abuso de los derechos humanos a los productores de Chiriquí, ante la llegada de una trasnacional. El Juez Primero Municipal del Distrito de Barú, Abdiel Chávez, anunció que presentó un recurso de hábeas corpus en favor de Arreaga y pidió a Valdés que le remita un informe sobre el caso en dos horas. Arreaga estuvo fuera del país por dos años ante las amenazas en su contra por defender el Humedal Laguna Matusagaratí, en Darién, el tapón natural que une a Panamá y Colombia.
Otra detención en Guatemala
No es el único arresto de un periodista en Centroamérica que se ha conocido hoy. La Asociación de Periodistas de Guatemala condenó la detención de un reportero de un diario local en la ciudad colonial de La Antigua, en el centro del país, ocurrida durante una cobertura en Año Nuevo.
"El grupo de cuatro periodistas estábamos haciendo entrevistas, nuestros sondeos, cuando llegó un policía a decirnos que teníamos que quitarnos de ahí. Terminé mi entrevista y le enseñé mi gafete, le dije que estaba trabajando. Él me dijo que también está haciendo su trabajo. Yo le dije que su trabajo era velar para que no se roben nada de los comercios y que no estábamos estorbando el trabajo de los bomberos”, indicó Solís a la prensa local. La discusión derivó en una trifulca y alguien lanzó gas pimienta.
La organización que vela por los derechos de los periodistas en Guatemala subrayó que la aprehensión del reportero Pablo Solís, del rotativo Nuestro Diario, es "arbitraria", pues mientras éste cubría un incendio de locales comerciales en la calle del Arco, policías lo consignaron acusándole de haberles arrojado el gas pimienta.
El hecho ocurrió en la madrugada del 1 de enero, en la que también fue detenido el reportero del canal de televisión local Santiago TV Mynor Cáceres quien fue "golpeado por los mismos agentes que acusaron y aprendieron a Solís", aseguró la Asociación. Tras doce horas arrestado, declaró ante el juez en audiencia por presunta agresión a los policías. Este lo dejó libre, pero tendrá que presentarse ante las autoridades cada dos semanas y no podrá salir del país.
"Los agentes supuestamente agraviados fueron sometidos a estudios por parte del Instituto Nacional de Ciencias Forenses para establecer si fueron rociados con gas o inventaron los hechos para criminalizar a Solís", agregó la Asociación de Periodistas. La organización también señaló que durante la audiencia del reportero hubo policías abordo de una camioneta que fotografiaron e intimidaron a otros periodistas que cubrían el hecho en el Juzgado.
lgc (efe/laprensa/lahora)
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