Fútbol: Dortmund y Bayern se lanzan dardos dialécticos ante el clásico

El Borussia Dortmund y el Bayern de Múnich han empezado a "prepararse" para el clásico alemán de este fin de semana lanzándose dardos dialécticos. El manager general del Bayern, Uli Hoeneß, el encargado habitual de fustigar al rival con declaraciones previas a los partidos, ha aprovechado la difícil situación financiera que atraviesa el Dortmund para bromear respecto a presuntas dificultades del rival para vender a buen precio algunos jugadores. "No creo que ningún club del mundo vaya a comprar a Thomas Rosicky", dijo Hoeneß sabiendo que una venta del centrocampista checo es una de las fórmulas que tiene en mente el Dortmund para sanear sus finanzas. En cambio, Hoeneß manifestó, justo un par de días antes del partido, su interés por fichar a Torsten Frings, a quien el Dortmund acaba de declarar intransferible. El homólogo de Hoeneß en el Dortmund, Michael Zorc, ha dicho que si Hoeneß quiere comprar algún jugador del Borussia primero tiene que decidir cuál. "Una semana habla de fichar a Dedé, la semana siguiente quiere a Frings. Veremos a quién quiere mañana", bromeó Zorc. Zorc, cuyo equipo ocupa el sexto lugar y es ajeno a la lucha por el título, se manifestó convencido de que sus jugadores no se dejarán inquietar por las declaraciones de Hoeneß, típicas en la recta final de la Bundesliga cuando el Bayern todavía puede pelear por el título.