Hace 150 años nacía el Imperio Alemán
En 1871, el emperador Guillermo I proclamó el Imperio Alemán en Versalles. Esto marcó el comienzo de una nueva era, no solo política y económica, sino también cultural. Aquí, las imágenes.
Proclamación del primer emperador alemán
El 18 de enero de 1871, Otto von Bismarck leyó la Proclamación del Emperador en el Salón de los Espejos de Versalles. La victoria sobre Francia en la guerra franco-prusiana (1870/1871) condujo a la fundación del Imperio Alemán. El pintor Anton von Werner fue testigo y capturó este momento histórico en este cuadro, de 1885.
El Reichstag de Berlín
Berlín se convirtió en la primera capital del Imperio Alemán. La primera piedra del nuevo edificio del Reichstag fue colocada el 9 de junio de 1884, y su construcción se extendió durante diez años. El emperador Guillermo II puso la última piedra del Reichstag, en el que el Parlamento pudo reunirse al día siguiente.
Monumento ecuestre en el castillo Kyffhäuser
El monumento con la estatua ecuestre del emperador Guillermo I y del emperador Federico I Barbarroja (1122-1190) tallada en piedra fue construido sobre los restos del castillo Kyffhausen del siglo XI-XII. Hoy en día, el castillo es una de las principales atracciones turísticas de Turingia.
Vivir al estilo de la época imperial
El Museo Gründerzeit de Berlín recuerda la época entre 1871 y 1914. El mobiliario estaba destinado a ser representativo y a la vez tenía un estilo lujoso. Dominaban las formas angulosas, los ricos ornamentos y los muebles con patas torneadas con terminaciones esféricas. Las sillas y los espejos a menudo tenían accesorios en forma de pequeñas coronas.
Otto von Bismarck
Existen aproximadamente más de 10.000 lugares en todo el mundo que hacen referencia a Otto von Bismarck. Los monumentos en Alemania fueron construidos entre 1868 y 1934. También se pueden encontrar homenajes a Bismarck en las antiguas colonias alemanas. En Dar es-Salam hay una plaza Bismarck, y en Papua Nueva Guinea una montaña lleva el nombre de Otto von Bismarck.
El culto del canciller
Otto von Bismarck fue el fundador del Imperio Alemán en 1871. El primer canciller alemán fue conservador y moderno a la vez. El monumento a Bismarck (foto) en un parque en Hamburgo fue erigido entre 1901 y 1906, según los planos del arquitecto Emil Schaudt y el escultor Hugo Lederer.
Guerra franco-prusiana
Las escenas de la guerra franco-prusiana (1870-1871), en la que Francia fue derrotada, fueron uno de los motivos favoritos de muchos pintores de la época del emperador Guillermo. Esta pintura, hecha en el estilo del historicismo, también es de Anton von Werner. Muestra a un soldado de infantería francés despidiéndose de su esposa. Su hijo yace en los brazos de un mosquetero alemán.
Catedral de Berlín
El nuevo imperio también necesitaba una catedral representativa. Guillermo II, en su calidad de emperador alemán y rey de Prusia, ordenó la demolición de la catedral de Schinkel y la construcción de una nueva catedral, según los planos de Julius Raschdorf. Su diseño debía recordar las formas del Renacimiento italiano y el Barroco. La catedral fue inaugurada el 27 de febrero de 1905.
Museo Bode
Guillermo II ordenó construir el Museo Kaiser Friedrich, ahora Museo Bode, en la Isla de los Museos de Berlín, en memoria de su padre, el emperador Federico III. Debido a la sala con cúpula decorada con estuco y a las escaleras de doble tramo, tenía la reputación de ser un "museo palacio". En 2006 fue reabierto, después de un período de reformas.
"El súbdito"
El escritor Heinrich Mann escribió su novela “El subdito” como una crítica feroz del ambiente ue se vivía en el imperio bajo Guillermo II. Mann la escribió entre 1906 y 1914; apareció por primera vez como una novela en serie en una revista y no fue publicada hasta 1918, año que marca el fin del Imperio alemán. La novela retrata la vida de un personaje cobarde y oportunista: el perfecto súbdito.