Hundertwasser y Gaudí: paralelas que se encuentran
12 de octubre de 2005En Magdeburgo acaba de ser inaugurada la "Ciudadela Verde", complejo arquitectónico compuesto por oficinas, viviendas, locales comerciales y parques. La construcción de esta obra se llevó a cabo siguiendo los planos del ya fallecido arquitecto austriaco Friedensreich Hundertwasser.
Hundertwasser nacio en Viena y hasta poco antes de su muerte trabajó en el diseño de la "Ciudadela Verde". En él fue fiel a su principio de hacer una arquitectura acorde a las necesidades de los seres humanos. Su objetivo principal era lograr que el ser humano, la naturaleza y la creación encuentren puntos de conexión.
La "Ciudadela Verde" surge de forma irregular desde el piso y ofrece desde diferentes puntos de vista formas inéditas, a descubrir por el visitante. El verde del césped no se encuentra sólo en los jardines sino también en los techos. Nada se atiene a las reglas de la arquitectura tradicional ni es convencional.
Gaudí, el inspirador
Hundertwasser encontró la inspiración de su trabajo en las obras del más renombrado arquitecto catalán, Antonio Gaudí. En la recientemente inaugurada "Ciudadela Verde" podemos admirar cúpulas, líneas y ventanas irregulares que se asemejan a las creaciones del maestro español.
El arquitecto, pintor y ecologista Hundertwasser buscó en su trabajo construir edificios evitando líneas y ángulos rectos. Su obra es por muchos apreciadas y al mismo tiempo por muchos criticadas. Ella logra crear espacios diferentes en el paisaje ciudadano y es en ella donde casi siempre se detiene, más de lo común, la mirada del pasante.
Visiones compartidas
Ambos arquitectos crearon líneas y recorrieron caminos paralelos. Muros y ventanas torcidas no son las únicas semejanzas de estos dos arquitectos. Ambos causaron polémicas, ambos quisieron cambiar las formas arquitectónicas, ambos heredaron a las siguientes generaciones planos, proyectos y esquemas que después de sus muertes siguen siendo llevados a cabo.
Los dos arquitectos tienen paralelos en sus vidas, pero, a diferencia de las paralelas en la geometría, ellos en muchos puntos se encuentran.
Ambos fueron innovadores de un estilo único, de un estilo arquitectónico que no se limita a construir edificios, sino a confundir fachadas con grandes acuarelas.
La última similitud de las vidas de Hundertwasser y su inspirador Gaudí es que en ninguno de los dos llegó a dar el toque final a sus obras. Nunca tendremos el comentario de cierre sobre la construcción de sus últimos diseños.