Alemania: lucha legal por tanque antiguo hallado en sótano
27 de julio de 2021Un hombre de 84 años está siendo juzgado por el Tribunal Regional de Kiel, Alemania, por posesión de un viejo tanque y otras armas de la Segunda Guerra Mundial. En su escrito de acusación, el fiscal acusa al coleccionista de varias violaciones de la Ley de Control de Armas de Guerra, así como de las leyes sobre armas y explosivos.
En 2015, los agentes de policía encontraron un carro de combate alemán de la Segunda Guerra Mundial en la propiedad del hombre en Heikendorf.
En el juicio se conoció el mes pasado el contenido de una carta del distrito de Plön, en el nórdico estado federado de Schleswig-Holstein. La administración del distrito le había escrito al propietario del tanque tipo "Panther" a finales de octubre de 2005, casi diez años antes del registro de los objetos, que fueron retirados de la casa en 2015 con la ayuda del Ejército. "Me ha convencido de que los vehículos blindados han perdido sus propiedades de arma de guerra", escribió la administración del distrito.
Delitos relacionados con la ley de armas
Durante un registro en el verano de 2015, los agentes le incautaron un mortero, así como numerosas armas de fuego y más de 1.000 cartuchos, además de la "Pantera".
En el centro del juicio está la cuestión de si el tanque y otros equipos de guerra entran en la Ley de Control de Armas de Guerra y, por tanto, no pueden ser de propiedad privada.
A diferencia de la acusación, la Séptima Sala de lo Penal asume, basándose en varios dictámenes periciales, que solo el cañón antiaéreo sigue siendo un arma de guerra. El tanque solo tiene una función de museo, dijo el presidente del tribunal, Stephan Worpenberg.
El tribunal había sugerido sustituir el cañón por un objeto de imitación.
Tanque comprado en 1977 como chatarra en Inglaterra
La inspección de obras ya había tenido conocimiento de la existencia del depósito en Heikendorf, por lo que el distrito se dirigió por escrito al acusado. El hombre respondió que había comprado el tanque en 1977 como chatarra en Inglaterra. Estaba listo para conducir, la culata del arma ya había desaparecido en Inglaterra y el cañón había sido cortado. Adjuntó fotos para documentarlo.
En el orden del día también figuraban las transcripciones de las conversaciones telefónicas del acusado procedente de una vigilancia telefónica, que tuvo lugar en el transcurso del procedimiento relativo a una posible violación de la Ley de Control de Armas de Guerra.
El fiscal Thorsten Wolke solicitó –finalmente sin éxito– que el material fuera admitido como prueba. Demostraron que el acusado de 84 años había actuado intencionadamente, dijo el fiscal.
Según el fiscal, tras el registro en el verano de 2015, el acusado habría dicho por teléfono: "Quería preparar el tanque como una vez salió de la fábrica".
El abogado de la defensa calificó las peticiones de pruebas como sin sentido y habló de "conclusiones atrevidas" por parte de la fiscalía. La sala rechazó las peticiones de prueba por considerarlas sin sentido.
El juicio que tenía programado continuar este 26 de julio. El veredicto podría llegar a principios de agosto.
FEW (dpa, Süddeutsche Zeitung, AFP, BBC)