Manifestantes en Moscú exigen Justicia independiente y nuevas elecciones
10 de marzo de 2012Los organizadores hablaron de 30.000 participantes y las autoridades de 10.000 en la protesta en Moscú que transcurrió de forma pacífica, pero rodeada de amplias medidas de seguridad. Interfax señaló que al menos 2.500 policías estaban de servicio en la zona.
Por primera vez, los opositores hablaron en sus discursos de una "Revolución Naranja" al estilo de la producida en 2004 en Ucrania. Nadie debe tener miedo pues los cambios en la ex república soviética transcurrieron de forma pacífica, dijo la joven opositora Vera Kichanova. Putin advirtió recientemente de "revoluciones de colores", con las que, asegura, potencias extranjeras quieren desestabilizar sociedades de las antiguas repúblicas soviéticas.
Piden poder judicial independiente
"Tenemos pedidos claros: reformas políticas, el establecimiento de un poder judicial independiente, el fin de la censura a la prensa, la elección directa de gobernadores y nuevos comicios a la Duma (el parlamento nacional) y la presidencia", declaró a la agencia de noticias Interfax el activista político Vladimir Ryzhkov.
"Continuaremos pidiendo reformas políticas y nuevas elecciones. Seguiremos solicitando la liberación de todos los prisioneros políticos", agregó Ryzhkov, un ex miembro del Duma y actual profesor de Economía. Las reformas anunciadas por el presidente saliente Dmitri Medvedev no bastan. "Los líderes tienen miedo de nosotros", gritó el politólogo Dmitri Oreshkin. "El futuro es nuestro". El opositor y ex campeón mundial del ajedrez, Gari Kasparov, acusó a Putin de ser un "dictador".
Entre los participantes se encontraban seguidores de distintas tendencias políticas: nacionalistas, de izquierda y liberales. Se vieron numerosas banderas del partido Jabloko, a cuyo candidato Grigori Javlinski no se le permitió participar en los comicios presidenciales.
“Formular rápidamente las cosas que defendemos"
La oposición necesita un programa positivo, exigió la moderadora de televisión Xenia Sochak. "Sabemos contra lo que estamos, pero debemos formular rápidamente las cosas que defendemos", añadió. Putin acusa a sus opositores de no ofrecer alternativa.
Sergei Udaltsov, uno de los organizadores de la protesta y líder del movimiento Left Front, convocó una "marcha del millón" antes de la toma de posesión de Putin a comienzos de mayo. Tras el final de la manifestación, las fuerzas de seguridad lo detuvieron junto a algunos seguidores, acusándolo de "provocación" por intentar marchar hacia otra plaza no autorizada para las protestas.
La policía también detuvo a 25 ultranacionalistas que planeaban tomar una ruta no autorizada a Moscú. Además, 60 personas fueron detenidas en San Petersburgo en una marcha no autorizada y en la tercera ciudad del país, en Nizhni Novgorod, a 400 kilómetros al este de Moscú, fueron detenidos otros 60 críticos del Kremlin.
Acusaciones de manipulación
Las marchas estuvieron rodeadas de un fuerte despliegue de la seguridad. Además, la policía cerró el tráfico en la zona de la protesta horas antes de su comienzo y la cercó con rejas y detectores de metal, formándose un gran embotellamiento.
Putin, quien actualmente ocupa el cargo de primer ministro, ganó los comicios generales de la semana pasada con el 64 por ciento de los votos, lo que hizo innecesario una segunda vuelta. Los observadores rusos denunciaron manipulaciones y la Organización para la Cooperación y Seguridad en Europa (OSCE) criticaron la votación como injusta.
dpa
Editor: José Ospina-Valencia