1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

¿Qué debe cambiar en la Bundesliga femenina?

29 de enero de 2024

En enero, la Bundesliga femenina perdió a las estrellas Felicitas Rauch, del Wolfsburgo, y Lina Magull, del Bayern. ¿Qué significan estos cambios de rumbo?

https://p.dw.com/p/4bnsQ
Dos mujeres jugando al fútbol.
Lina Mogull (drcha.) y Felicitas Rauch abandonan la Bundesliga.Imagen: Ulrich Gamel/kolbert-press/IMAGO

La marcha de Felicitas Rauch del Wolfsburgo para unirse al North Carolina Courage, en Estados Unidos, es una sorpresa. Esto sucede una semana después de que se diera a conocer que Lina Magull, del Bayern de Múnich, se va al Inter de Milán. Estas dos veteranas internacionales alemanas dejan su país para jugar en el extranjero. Pero, ¿es esto una señal de que se está produciendo un gran cambio en el fútbol femenino alemán o solo se trata de dos jugadoras que desean tomar nuevos rumbos?

Cuando Pernille Harder y Magdalena Eriksson se unieron al Bayern de Múnich al comienzo de la temporada, la Bundesliga femenina no sólo parecía ir encaminada hacia otra emocionante competición, sino que también Alemania se estaba convirtiendo en un lugar más popular para jugar fútbol femenino.

Con el nuevo acuerdo de derechos audiovisuales para esta temporada, alrededor de 4,9 millones de euros anuales, la recién nombrada Google-Pixel Frauen Bundesliga parecía destinada a tener su mejor temporada hasta el momento, incluso careciendo de canales propios de redes sociales y con una programación un tanto extraña.

2024: ¿un año de cambios?

Y aunque es cierto que la competición por el título de la Bundesliga sigue siendo tan apasionante como siempre, tanto el Bayern como el Wolfsburgo, dos clubes de la élite europea, están más involucrados en el negocio de la transferencia de jugadoras que en fichar a nuevas futbolistas.

El Bayern, que recientemente vio como Maximiliane Rall se fue al Red Chicago Stars, fichó como préstamo a la leyenda sueca Linda Sembrant, de 36 años, un impulso necesario para la defensa mermada del equipo. El Wolfsburgo sólo ha fichado a una defensa, Diana Nemeth.

Con la Liga Nacional de Fútbol Femenino (NWSL) sellando un acuerdo de derechos audiovisuales de 55 millones de euros al año en EE. UU., 40 veces mayor que el de 2023, y la Super Liga Femenina (WSL) en Inglaterra, a punto de cerrar un nuevo acuerdo probablemente mucho más abultado que el actual, de casi 9 millones de euros por temporada, el nuevo acuerdo de la Bundesliga parece insignificante con respecto a los demás. Sin la inversión de los clubes masculinos, los equipos femeninos independientes en Alemania tienen más dificultades para sobrevivir.

¿Bundesliga femenina atrasada?

En el caso de las jugadoras que abandonan la Bundesliga, puede ser que quieran hacer algo diferente, porque el fútbol femenino se ha desarrollado más a nivel internacional y ahora hacer cambios es más factible. Como dijo Rauch recientemente a la revista de fútbol alemana "Kicker", "Inglaterra, Barcelona o Lyon" no son las únicas opciones.

La jugadora de 27 años deja Wolfsburg después de dos títulos en la liga alemana y, tras una lesión, busca recuperar su forma y su lugar en la selección nacional. Magull deja el Bayern después de más de 100 partidos y dos títulos de liga. La centrocampista juega en Alemania desde hace 15 años, por lo que el cambio está más que justificado.

Por otro lado, es difícil evitar la sensación de que la liga alemana femenina de fútbol se está quedando atrás. Después de obtener el título de subcampeonas en la Eurocopa 2022, existía el deseo de que la selección nacional lograra un cambio duradero. Con la llegada de un nuevo patrocinador y más equipos invirtiendo en el fútbol femenino, algunos de esos cambios ya tuvieron lugar, pero la liga femenina sigue intentando ponerse al día.

Además de una mayor visibilidad, también ayudarían fichajes de futbolistas importantes para impulsar el lugar de la Bundesliga en el fútbol mundial, sobre todo, después de la fallida actuación en la Copa Mundial en Australia y Nueva Zelanda. Entre tanto, la Bundesliga femenina tendrá que seguir esperando a que su fútbol hable por sí mismo.

(rmr/ers)