Razones superpoderosas para reír de buena gana

El 6 de octubre se celebró el Día Mundial de la Risa. Y quizás una de las risas más famosas del mundo sea la de Julia Roberts, cuya amplia expresión parece siempre genuina. Los expertos dicen que hay dos tipos de sonrisas: la forzada y la real. Para determinar a cuál corresponde una, basta con mirar los ojos. Si las llamadas "líneas de la sonrisa" no se mueven, es un hecho: la sonrisa es falsa.

Aunque algunos expertos estiman que en la sociedad actual es más aceptada la sonrisa femenina que la masculina, en los retratos de los siglos pasados las sonrisas eran bastante inusuales. Una de las más famosas del mundo del arte es la de la Mona Lisa, aunque es tan sutil que es difícil saber qué pensaba la musa. ¿Es una sonrisa satisfecha? ¿Una sabihonda? ¿Un gesto seductor?

¿Por qué la gente no sonríe en esos viejos retratos? El historiador Colin Jones analiza el tema en su libro "The Smile Revolution in 18th Century Paris", en el que argumenta que el significado de la sonrisa refleja un momento. Antes de la Revolución Francesa, una sonrisa podía ser interpretada como condescendiente, mientras que en plena revolución, podía verse como una señal de apoyo a la causa.

Como señala Jones, el significado de una sonrisa depende del tiempo y el lugar en que ocurran. En Alemania, país conocido por su humor más bien sombrío y seco, ver a una persona sonreír no es algo sencillo, lo que no quiere decir que los alemanes no sonrían. Basta con ver algunas fotos de la canciller Angela Merkel: aunque normalmente tiene cara de póker, a veces desliza unas sonrisas genuinas.

Uno de los monarcas alemanes más excéntricos, el káiser Ludwig II de Baviera, nunca aparece sonriendo en sus retratos. Algunos piensan que ello se debe a su eterno amor por los dulces sumado a la falta de cuidado dental en el siglo XIX, mientras otros creen que su suicidio tuvo que ver con secretos que explicarían que nunca cambiara su gesto adusto.

Es imposible no sonreír cuando se oye al rey del jazz, Louis Armstrong, diciendo "cuando tú sonríes, todo el mundo sonríe contigo". Unos investigadores suecos descubrieron que esto era cierto. De hecho, para quienes participaron en el estudio era prácticamente imposible fruncir el ceño cuando se les decía que sonrieran, casi como si poner cara de felicidad fuera algo intuitivo.

Con el tiempo se volvió común que los hombres dijeran a las mujeres que debían sonreír. Ellas han respondido diciendo que ese tipo de mensajes puede ser molesto. Después de todo, los extraños no tienen cómo saber las razones que hay detrás de un gesto adusto. Pese a todo, Marilyn Monroe recomendaba a la gente "sonreír, porque la vida es hermosa y hay muchas razones para ser feliz".

Más que una serie de ejercicios de estiramiento y respiración, el yoga dice ayudar a la gente a pasar los momentos más difíciles manteniéndose enfocados. En el yoga de la risa, eso ocurre cuando un grupo de personas se reúne para reír. Quienes lo practican aseguran que es contagioso y cuando uno empieza a reírse, todos se alegran. El objetivo: aportar mayor felicidad a la vida.