Rusia y Georgia: las tensiones siguen vigentes
6 de agosto de 2009Se escuchan nuevamente ruidos de sables entre Rusia y Georgia. Un año después de la Guerra en el Cáucaso entre ambos países, la tensión sigue vigente, tanto el presidente georgiano Mijail Sakashvili y el Kremlin se acusan mutuamente de preparar nuevas provocaciones. Agencias reportan que el portavoz del ministro del Exterior ruso, Andrei Nesterenko, exigió a los países occidentales que dejen de abastecer con armas a Georgia, ya que eso anima al gobierno de Tibilisi a “aventuras militares”.
Hasta la fecha no se sabe exactamente lo que pasó la noche del 7 al 8 de agosto de 2008, cuando los ojos del mundo estaban puestos en la apertura de los Juegos Olímpicos de Pekín. Después se impusieron las imágenes de tanques rusos y los reportes de prensa que daban cuenta de decenas de muertos.
Decenas de miles de personas tuvieron que huír en la rebelde región georgiana de Osetia del Sur, al incursionar tropas georgianas. El primer ministro ruso, Vladimir Putin, anunció desde la capital china que Rusia respondería a la agresión. Argumentando que debía proteger a la población de dicha región rebelde, el ejército ruso movilizó tanques, bombarderos y batallones. Durante los cinco días que duró el conflicto armado murieron más de 400 personas, hasta que intervino la Unión Europea, que en aquel momento era representada por el presidente francés, Nicolás Sarkozy. Tras el conflicto, Rusia reconoció a Osetia del Sur y a Abjazia, otra república georgiana secesionista, como Estados independientes.
Tanto la UE como Estados Unidos acusaron a Rusia de haberse excedido en el uso de la fuerza contra Georgia. El incidente provocó un distanciamiento de Occidente con Rusia, y sentó un precedente con la OTAN, alianza que defiende la indivisibilidad del territorio de Georgia.
Una comisión investigadora liderada por la experta suiza Heidi Tagliavini presentará en otoño el resultado de sus investigaciones. Deutsche Welle entrevistó al ex-presidente de Georgia. Eduard Shevardnadze.
Deutsche Welle: Desde la guerra en Osetia del Sur ha transcurrido casi un año, ¿cómo evalúa ahora los acontecimientos? ¿Quien tuvo la responsabilidad en el derramamiento de sangre?
Eduard Shevardnadze: Antes decía yo que ambas partes tuvieron la culpa, en primer lugar Georgia, porque fuimos los primeros en incursionar con tropas. Pero desde que se constituyó la comisión investigadora bajo la dirección de la experta suiza Heidi Tagliavini, procuro no hacer más declaraciones hasta que sea presentado el informe, previsiblemente a finales de agosto. Los expertos son buenos y llegarán a un resultado.
Deutsche Welle:¿Entonces confía usted en la Comisión Tagliavini?
Eduard Shevardnadze: Sí, son gente seria, expertos serios.
Deutsche Welle: Pero si el reporte Tagliavini afirma que Georgia comenzó la guerra, eso modificará la relación con Europa...
Eduard Shevardnadze: Yo no creo que ese sea el resultado del informe. Tal vez llegue a la conclusión de que cometimos errores al ser los primeros en incursionar en Osetia del Sur, eso si es que lo llegan a confirmar, pero el resto de los sucesos, la ocupación de Georgia, los numerosos muertos y casas destruidas, eso no hay que subestimarlo y creo que será valorado en concordancia.
Deutsche Welle:¿Que pasará con Abjazia y Osetia del Sur? Rusia las ha reconocido como repúblicas independientes y ha estacionado tropas en su territorio. ¿Ha perdido Georgia estos territorios para siempre?
Eduard Shevardnadze: No lo creo. Si esos territorios no son devueltos voluntariamente y por iniciativa de Rusia a Georgia, entonces comenzará la efervecencia también en Rusia. Y más que una efervecencia se producirá un movimiento independentista. Chechenia, Ingusia, Kabardino-Balkaria y Tartaristán y otras repúblicas comenzarán a pelear por su independencia.
Deutsche Welle: Hace poco Rusia bloqueó en el Consejo de Seguridad la misión de la ONU en Georgia que estaba asignada a Abjazia. Antes de eso impidió que una misión de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) no fue prolongada por el conflicto sobre el estatus de Ossetia del Sur, ¿Porqué actúa Moscú de esa manera?
Eduard Shevardnadze: Cometieron un error. Cuando el presidente Medjédev dispuso esto, dije que había que declararlo como falto de experiencia. Pero el ministro del Exterior es un diplomático experimentado, que incluso trabajó en la ONU, así que fue un grave error.
Deutsche Welle: ¿Tiene sentido enviar soldados de la ONU a Georgia o fortalecer la presencia de observadores en dicho país?, ¿Puede esto contribuir a recuperar la confianza entre georgianos, abjazianos y osetios?
Eduard Shevardnadze: Rusia puede hacer fracasar toda resolución del Consejo de Seguridad de la ONU si se contrapone a sus intereses. ¿Pero cuál fue nuestro error? Si queríamos el apoyo del Consejo de Seguridad, nuestro presidente debía haber viajado a Nueva York, tenía que haberse involucrado y convencer a todos. Pero no hizo eso.
Deutsche Welle: ¿Que debe hacerse para normalizar las relaciones entre Georgia y Osetia del Sur? ¿Hay que ponerse de acuerdo con Rusia?
Eduard Shevardnadze: Necesitamos una atmósfera general adecuada. Hoy en día mucho depende de Estados Unidos y por cierto, pienso que la visita de Medjédev a Osetia del Sur (en julio de 2009) fue un error craso. No debía haber hecho eso.
El político georgiano Eduard Shevardnadze y abogado de profesión, ejerció el cargo de Ministro de Asuntos Exteriores de la Unión Soviética bajo la presidencia de Mijaíl Gorbachov desde 1985 hasta 1990. Fue presidente de Georgia de 1995 hasta el 2003.
Autor: Roman Goncharenko/ Eva Usi
Edición: Claudia Herrera Pahl